6 Leyendas Sobre la Sexualidad de las Chicas
Seis leyendas sobre la sexualidad femenina
Las chicas siempre han estado rodeadas de temas tabú, sobre todo respecto al sexo. Por eso, a lo largo de la historia, se han creado unas fábulas, casi leyendas y mitos que no se corresponden con la realidad. Es nuestro deber indicaros cuáles son los que la gente siempre ha dado por ciertos, y no podrían estar más lejos de la realidad.
1. Las chicas no se masturban
En una encuesta universitaria, se preguntó a más de 2.000 chicas acerca de esta cuestión. ¿Los resultados? Más del 50% de entre 18 y 60 años declaró masturbarse con frecuencia, ya fuera con juguetes sexuales o con sus dedos. Por si fuera poco, esta investigación aseguraba que la masturbación mejoraba el humor de las chicas.
2. El sexo durante la menstruación es poco higiénico
Curiosamente, al contrario de lo que dictamina esta frase, se dice que las relaciones sexuales alivian el dolor menstrual, y que si una pareja no ve problema alguno, lo harán. En CAM4, parejas follando, tenemos unas cuantas.
3. El punto G es lo que otorga mayor placer a la mujer
Si bien es una de las zonas más sensibles de la mujer, no está comprobado científicamente que el punto G sea el lugar de máximo placer, y mucho menos que sea el único lugar que les satisface.
4. Sólo la penetración da placer
Nada más lejos de la realidad. El clítoris, si es estimulado correctamente, potencia el placer durante el sexo, y es bien sabido que las chicas pueden tener un orgasmo sin que la penetración sea necesaria.
5. El sexo oral sólo les gusta a los chicos
En más de un estudio se ha desvelado que algunas chicas también disfrutan practicando el sexo oral a los chicos. No sólo esto, sino que muchas experimentan primero con el sexo oral antes que con el vaginal.
6. Ninguna disfruta del sexo anal
Una encuesta sobre la prevención de enfermedades desveló que el 32.6% de las chicas entre los 18 y 44 años practica el sexo anal.
Pues ahí queda eso. Las investigaciones actuales ayudan a desmitificar estos dichos tan anticuados. Y es que hoy en día se tiene una mente mucho más abierta al sexo de lo que existía antes. ¡A disfrutar!