Guía Pegging para Principiantes
Hoy os proponemos probar algo diferente: el pegging. El pegging es la experiencia sexual en la que la mujer pratica el sexo anal a su pareja con un consolador atado a su cintura (strap-on dildo en inglés) Si eres hombre y nunca has experimentado el placer prostático ¡Tienes que probar esta aventura que te llevará directo a un nuevo nivel de placer! Pero no solo es para los hombres porque las mujeres también pueden recibir su dosis de placer a la vez que se divierten.
Durante el pegging las mujeres toman el control de la relación sexual, no en un modo dominación BDSM sino emocional. Se invierten los papeles lo que resulta muy excitante a la vez que íntimo. Aunque el sexo anal para muchos hombres es aún un tabú, ya es hora de romper esas barreras. El pegging tiene el potencial de profundizar los lazos entre las parejas rompiendo los muros del pudor. Imagínate a tu hombre debajo de tí gimiendo y retorciéndose de placer, o practicando el estilo perrito al revés. Para aquellos que no lo hayan probado y quieran probarlo CAM4 ha preparado una guía con los pasos que deben seguir.
Pegging para principiantes
Lo primero es decidir el tamaño del consolador que vais a utilizar. Esto depende de la experiencia que tu pareja haya tenido en la excitación anal. Si ha probado antes el pegging puede que quiera probar algo más grande esta vez. No obstante, para los novatos es mejor utilizar consoladores pequeños. Lo ideal es que le preguntes a él o mejor aún ¿Por qué no ir a comprarlos juntos?
La verdad es que la primera vez les duele a muchos hombres. Por eso es súper importante centrarse en los preliminares y tener un lubricante a mano. Empezad masajeando la zona, pasad a los besos y seguid con los dedos. No introduzcas el consolador de una vez, vete poco a poco jungando y viendo en todo momento si él está cómodo y disfrutando. Y no os cortéis con el lubricante utilizad todo el que necesitéis.
Una vez está listo lo mejor es probar la posición del perrito, esta posición es la mejor para empezar. Luego ya podréis probar todas las que se os ocurran. En la penetración mete primero la punta del consolador muy despacio. Aquí la clave está en la comunicación. Si le duele poned más lubricación y volved a intentarlo. En cuanto a las mujeres, muévete como él te pida, o piensa en lo que a tí te gusta que haga y hazle lo mismo.
Si todo va bien y os ponéis apasionados estimula su pene también. Ahora todo su placer está en tí y seguro puedes hacerle explotar. Poco a poco podéis ir experimentando nuevas posturas o consoladores más grandes. Todo un nuevo abanico de placer se abre ante vosotros.